La
Manzana Envenenada
Por Jeffrey M. Kihien-Palza

Una manzana envenenada les
ha sido enviada a las mujeres peruanas, directamente a las jóvenes que recién
ingresan al mercado laboral, les han extendido el periodo de descanso por natalidad de 90 a 98
días (Ley 26644. DS 002-2016-TR). A simple lectura es una fabulosa noticia, de
ensueño, porque supuestamente es mejor que la madre este con el niño recién
nacido, así que estaría bien que deje el trabajo por más de tres meses. Es una
ley altruista.
Pero allí está la trampa, la
manzana envenenada del altruismo que destruye sociedades. Si se presenta un
varón y una mujer a un puesto de trabajo, ambos con la misma edad, experiencia
y educación, posiblemente la mujer tenga
mejores cualidades, y merecería ser contratada. Pero el empleador tendrá que
calcular el costo de emplear a la mujer que viene con su manzana envenenada
dentro de la cartera. Ausentarse más de tres meses del trabajo por
maternidad, más el mes de vacaciones,
son cuatro meses, ¿quién cubre su
trabajo? ¿Cómo afecta la productividad de la empresa? y muchas otras preguntas
más. En realidad complica el trabajo de la empresa y eleva los costos.
Podrán escribir tratados
argumentando en contra de mi teoría de
la “manzana envenenada,” pero la realidad es una y la evidencia es abundante,
no favorece a la mujer, no la ayuda a desarrollarse, a cumplir sus metas en la vida.
Lo que es más interesante es
que muchas de las normas laborales son sugeridas o impuestas por la
Organización Internacional de Trabajo (OIT), del cual Perú es miembro, desde
esa burocracia nos envían las leyes, las manzana envenenadas que sirven
únicamente para sabotear la libertad. En el caso específico de las leyes
laborales, el estado no tiene por qué intervenir, es mi trabajo y yo decido
como lo vendo, es mi libertad elegir el precio, mis vacaciones o si trabajo o
no. La protección del estado es una manzana envenenada. Mis condolencias a las
mujeres peruanas, les están boicoteando su derecho al trabajo.