La
Manzana Envenenada
Por Jeffrey M. Kihien-Palza
Creo que era el año 2006
cuando visite Buenos Aires, y me reuní con un amigo y colega abogado muy
conocido en esa ciudad. Compartimos aulas mientras ambos estudiamos el Master
in Law en Washington, DC. Eran los anos
del poder absoluto de los Kirchner en Argentina, que para mantener su
popularidad hacían uso del populismo legal que en apariencia es la receta más
barata. Recuerdo que le sugerí a mi amigo que contratara más abogados, porque
su carga de trabajo era abrumadora. Me respondió que contratar era muy
sencillo, lo difícil era despedir cuando la carga de trabajo disminuyera, que
es seguro sucedería. Agregando, que en un juicio laboral el empleador perdía casi siempre, y en caso
ganara igual tenía la obligación de
pagarle al trabajador los costos del juicio. “Es una extorción total, che,” me
dijo mi amigo, con el típico sarcasmo gaucho, para luego agregar,” más difícil
aun contratar mujeres, porque si salen embarazadas hay que darles por ley 90 días
libres que se pueden alargar hasta seis meses, y los empleadores nos quedamos
en el aire con el laburo, por eso nadie contrata mujeres.” Eso es lo que sucede
con las leyes laborales, que supuestamente defienden al trabajador, pero en la
realidad es una manzana envenenada que limita o elimina totalmente la creación
de empleo, afectando directamente al grupo que supuestamente quiere proteger.
Una manzana envenenada les
ha sido enviada a las mujeres peruanas, directamente a las jóvenes que recién
ingresan al mercado laboral, les han extendido el periodo de descanso por natalidad de 90 a 98
días (Ley 26644. DS 002-2016-TR). A simple lectura es una fabulosa noticia, de
ensueño, porque supuestamente es mejor que la madre este con el niño recién
nacido, así que estaría bien que deje el trabajo por más de tres meses. Es una
ley altruista.
Pero allí está la trampa, la
manzana envenenada del altruismo que destruye sociedades. Si se presenta un
varón y una mujer a un puesto de trabajo, ambos con la misma edad, experiencia
y educación, posiblemente la mujer tenga
mejores cualidades, y merecería ser contratada. Pero el empleador tendrá que
calcular el costo de emplear a la mujer que viene con su manzana envenenada
dentro de la cartera. Ausentarse más de tres meses del trabajo por
maternidad, más el mes de vacaciones,
son cuatro meses, ¿quién cubre su
trabajo? ¿Cómo afecta la productividad de la empresa? y muchas otras preguntas
más. En realidad complica el trabajo de la empresa y eleva los costos.
Podrán escribir tratados
argumentando en contra de mi teoría de
la “manzana envenenada,” pero la realidad es una y la evidencia es abundante,
no favorece a la mujer, no la ayuda a desarrollarse, a cumplir sus metas en la vida.
Lo que es más interesante es
que muchas de las normas laborales son sugeridas o impuestas por la
Organización Internacional de Trabajo (OIT), del cual Perú es miembro, desde
esa burocracia nos envían las leyes, las manzana envenenadas que sirven
únicamente para sabotear la libertad. En el caso específico de las leyes
laborales, el estado no tiene por qué intervenir, es mi trabajo y yo decido
como lo vendo, es mi libertad elegir el precio, mis vacaciones o si trabajo o
no. La protección del estado es una manzana envenenada. Mis condolencias a las
mujeres peruanas, les están boicoteando su derecho al trabajo.
Muy buen articulo amigo... Refleja exactamente lo que pasa...👍🏻
ResponderBorrarSon manzanas envenedadas que nos entregan. Como esa hay muchas.
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